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Jugamos con los niños de la familia, les regalamos libros para pintar y demás utensilios para ello. A los mayores de la familia les regalamos un costurero, ropa, para la limpieza y demás objetos que pensamos que serían prácticos en su vida cotidiana.
El día 16 de Febreo comienzan las prácticas. Nos levantamos con energía y nos dirigimos a los camiones que nos van a llevar a los distintos colegios de la wilaya. Mi madrazza (colegio) es el "Um Draiga" una madrazza con 10 edificios, seis de ellos para cada grupo según edades, uno para la dirección y sala de profesores, uno donde está la cocina, una capilla y uno como almacén para el material escolar.
Comienza la jornada con la subida de la bandera saharaui, me destinan al 4º curso junto a una compañera de la misma especialidad, esto facilita que a la vez de impartir el español podamos reunirnos para impartir las clases de música formando un coro escolar. Por motivos de incompatibilidad entre dos compañeras de 3º decido irme a ese nivel para separarlas y seguir con lo establecido en nuestro objetivo.
El horario es distinto al de España. El gobernador de la wilaya habló con el colegiio para que los profesores nos facilitaran la enseñanza del Castellano, impartir talleres recreativos y nuestra especialidad. Algunos maestros, como la nuestra (Klass) se quedaba para aprender nuevos recursos facilitándonos el trabajo constantemente.
De los peores momentos que viví en la madrazza fue cuando se producían maltratos a los niños, es algo que nos chocó a todos al llegar allí, ver como los maestros pegaban a los niños con palos o les retrocían los dedos con los bolígrafos simplemente por hablar en clase. A veces nos teníamos que salir de la clase por no ver esa clase de actos.
Durante algunos recreos y clases en horario de tarde realizamos la organización de un coro escolar. Nuestra función es la de hacer que los niños canten una canción española que contenga en su letra algún motivo referido con la situación vivida en el Sahara, por lo que mi compañera y yo nos pusimos a ello. Gracias a que vivimos juntos en la misma jaima, podemos decidir la canción que vamos a enseñar. Tras varias propuestas decidimos hacer un popurrí con los estribillos de tres canciones:
- "La vida es un Carnaval". Celia Cruz.
- "No estamos solos". Eros Ramazzotti y Ricky Martin.
- "Te iré a buscar". Gonzalo.
En la última canción cambiamos parte de la letra para nombrar la libertad que desean los saharauis.
El día 16 de Febreo comienzan las prácticas. Nos levantamos con energía y nos dirigimos a los camiones que nos van a llevar a los distintos colegios de la wilaya. Mi madrazza (colegio) es el "Um Draiga" una madrazza con 10 edificios, seis de ellos para cada grupo según edades, uno para la dirección y sala de profesores, uno donde está la cocina, una capilla y uno como almacén para el material escolar.
Comienza la jornada con la subida de la bandera saharaui, me destinan al 4º curso junto a una compañera de la misma especialidad, esto facilita que a la vez de impartir el español podamos reunirnos para impartir las clases de música formando un coro escolar. Por motivos de incompatibilidad entre dos compañeras de 3º decido irme a ese nivel para separarlas y seguir con lo establecido en nuestro objetivo.
El horario es distinto al de España. El gobernador de la wilaya habló con el colegiio para que los profesores nos facilitaran la enseñanza del Castellano, impartir talleres recreativos y nuestra especialidad. Algunos maestros, como la nuestra (Klass) se quedaba para aprender nuevos recursos facilitándonos el trabajo constantemente.
De los peores momentos que viví en la madrazza fue cuando se producían maltratos a los niños, es algo que nos chocó a todos al llegar allí, ver como los maestros pegaban a los niños con palos o les retrocían los dedos con los bolígrafos simplemente por hablar en clase. A veces nos teníamos que salir de la clase por no ver esa clase de actos.
Durante algunos recreos y clases en horario de tarde realizamos la organización de un coro escolar. Nuestra función es la de hacer que los niños canten una canción española que contenga en su letra algún motivo referido con la situación vivida en el Sahara, por lo que mi compañera y yo nos pusimos a ello. Gracias a que vivimos juntos en la misma jaima, podemos decidir la canción que vamos a enseñar. Tras varias propuestas decidimos hacer un popurrí con los estribillos de tres canciones:
- "La vida es un Carnaval". Celia Cruz.
- "No estamos solos". Eros Ramazzotti y Ricky Martin.
- "Te iré a buscar". Gonzalo.
En la última canción cambiamos parte de la letra para nombrar la libertad que desean los saharauis.
Continuará...
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