FAMILIARES CONTRA EL DESALOJO DE LA RESIDENCIA

Los familiares de los usuarios contra el desalojo de la residencia de Calzada de Calatrava.

El próximo 13 de marzo es la fecha fijada para el desalojo de la residencia.

Los familiares de los usuarios de la residencia de mayores Calatrava de Calzada aseguran que los ancianos no abandonarán este inmueble el próximo 13 de marzo, fecha fijada por el Juzgado de Almagro para el desalojo del mismo

Los familiares de los cerca de 50 usuarios de la residencia de mayores Calatrava de Calzada aseguraron este miércoles que los ancianos no abandonarán este inmueble el próximo 13 de marzo, fecha fijada por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Almagro para el desalojo del mismo. Tras una reunión con la directora provincial de Bienestar Social y la dirección del centro, los residentes y sus familiares y tutores firmaron un escrito que hoy enviarán al juez que instruye el caso para que suspenda el lanzamiento hasta que se resuelva «el problema gravísimo que existe respecto a la propiedad de la finca». 

En el escrito, al que ha tenido acceso La Tribuna, los afectados alegan que «no hay plazas suficientes en otros centros o residencias y las pocas plazas privadas de la zona son por un importe muy superior» al que pueden pagar. «Y no tenemos medios para tener en casa a nuestros familiares», apostillan, para hacer hincapié en que «los residentes no son muebles, sino personas con unas necesidades especiales». 

Asimismo, el documento subraya la situación judicial que pesa sobre la finca. «No estamos ante un caso en el que el propietario (la empresa Cabañas e Hijos SA) quiera entrar en su casa, sino en un caso en el que el propietario está a punto de perderla», resalta. En este punto, la abogada de la empresa que gestiona la residencia (Ruiz Espinosa 2013), Yolanda Montero, explica que hay un procedimiento de ejecución hipotecaria sobre esta finca. «Aunque el juez no ha emitido aún un decreto de adjudicación de propiedad, sí existe una subasta cerrada, celebrada el 15 de noviembre de 2018, en la que la finca fue solicitada y adjudicada a una nueva empresa», apunta la letrada para agregar que Cabañas e Hijos, que solicitó el desahucio del edificio por impagos del alquiler, presentó «un incidente por cláusulas abusivas con el objetivo de intentar paralizar la adjudicación».

En este contexto, tanto Ruiz Espinosa como los familiares de los residentes solicitan al juez que paralice el lanzamiento hasta que se resuelvan estas cuestiones, puesto que «el nuevo propietario tal vez querría continuar con esta actividad y no sería necesario que los ancianos abandonaran la residencia». Una petición que también realizó la Consejería de Bienestar Social y que el juzgado almagreño ha rechazado, tal y como confirmaron a este diario la propia abogada y la directora provincial, Prado Zúñiga, que ayer se reunió con los afectados para plantearles posibles soluciones ante el inminente desalojo. Zúñiga, que confía en que finalmente se llegue a un acuerdo y no se produzca el lanzamiento, les informó de las plazas libres que hay en residencias privadas de la zona, en un radio de 50 kilómetros, y de las ayudas que existen para el pago de este tipo de recursos sociales. También les ofreció la posibilidad de regularizar a cada uno de los mayores su grado de dependencia. Recordó que todas las plazas de la residencia Calatrava son privadas y que la Junta de Comunidades «no tiene una vinculación administrativa directa», aunque hizo hincapié en que hará todo lo que esté en sus manos para «ayudar a garantizar el bienestar de los mayores». A la salida de la reunión, los familiares agradecieron la mediación de la directora provincial de Bienestar Social y expresaron su «indignación» con las posturas adoptadas tanto por la empresa Cabañas e Hijos como por el propio juez, ya que consideran que «tenía que haber paralizado todo de oficio hasta que se resuelva judicialmente la ejecución hipotecaria». Además, los familiares añadieron que el próximo 13 de marzo, si antes no se llega a un acuerdo, estarán en la residencia junto a sus mayores para impedir que se produzca el desalojo. Muchos de ellos manifestaron que esperarán hasta el «último minuto» antes de trasladar a sus seres queridos a otros centros.

Fuente: la tribuna de Ciudad Real